Leyton presenta una serie compuesta de imágenes digitales impresas sobre soportes de tejido de lana blanca, hechos manualmente por ella y por encargo a otras personas, con el punto llamado "santa clara" o "bobo", que es el que generalmente utilizan quienes están aprendiendo a tejer.
Las obras retratan interiores domésticos, habitados por sillas, mesas, alfombras, plantas o artefactos de baño. En ellos la figura humana está ausente, pero latente. Puertas entreabiertas y ventanas dan paso a un paisaje exterior insondable, que se manifiesta como imágenes oníricas perdidas en la memoria.